domingo, 5 de abril de 2015

He estado ausente

Habrán de perdonar, queridos lectores, que me haya ausentado, pero esta tos que no me deja (y las flemas, los mocos, los pies fríos y el desgano) no me han permitido actuar con la energía habitual en mí. Claro, ahora todo es inhabitual, ¿o deshabitual?, como quieran y mi salud no ha sido la excepción. Ya quiero yo algo que conozca.
    La semana pasada o antepasada, ya perdí hasta la noción del tiempo, cuando estaba yo postrada cayó una fuerte nevada. La primera que me toca aquí y al parecer tampoco había habido otras así este invierno. Yo hubiera querido salir, tirarme en la nieve, correr, jugar, escuchar mis pisadas en ella, en fin, lo que toda persona no habituada a estos fenómenos haría, pero no me fue posible, realmente me sentía y estaba muy mal. Yo me dije: "que digan que estoy dormida... México, lindo y querido. No, no, no, nada de eso, yo quiero regresar por mi propio pie a mi terruño cuando haya oportunidad" y por eso no salí. Eso sí, tomé muchas fotos conforme fue arreciando la nevada y enseguida se las comparto. Perdonen la abundancia y los reflejos, pero las fui tomando desde adentro conforme arreciaba la tormenta (que eso fue lo que fue, según los reportes meteorológicos):

Aquí, las primeras briznas

Aquí, ya un poco más

Yo con mi cara de enferma, pero contenta
de ver la nevada que cada vez era más intensa






Lo verde, totalmente cubierto por lo blanco. Ya no había colores,
excepto blanco, negro y sus matices

Acá, la vista el otro lado de la casa.
La ramita, por supuesto, agachada



Y cada vez más

Que bonito es ver nevar y no helarse

Se quería meter hasta la cocina. Pero no la dejé, claro



Aquí ya era de madrugada. La piedra, casi totalmente cubierta

Huellas de pájaros

Y siguió. Yo creo que duró unas 36 horas.
También tomé un video. Aquí va. Éste sí se ve, no como el de los cisnes. No tienen que imaginar nada:



Y claro, mientras, yo prendí la chimenea.Eso de la lumbre se me da:



Qué buen fuego, ¿no?
Y para la nevada, un buen desayuno calorífico para amainar el temporal. Bueno, yo estaba adentro, pero igual de ver da frío :-)

Hot cakes con mantequilla, plátano, yogurth
(de los de Lourdes) y una jalea de unas frutas rojas
que como aquí hay muchas, no sé de cuáles sean, pero están
muy buenas. Y un cafecito con leche, para que no se me atorara 

Ya luego cesó la nieve, subió la temperatura y la nieve empezó a derretirse:

Y claro, el cielo empezó a despejarse


De nuevo el azul en el cielo, en el agua y en todo lugar

Erik tuvo que palear la entrada. Ni modo, quería entrar.



Ya medio se empezaba a ver el verde del pasto
Y ya estamos verdes otra vez. Claro, el frío no cesa, salvo como a las 5 de la tarde, que es cuando más alta está la temperatura: 8 ó 9 grados. :-/

Esto fue hace unos tres días, cuando hacía mucho viento,
como se puede ver en el agua

Yo seguía encerrada
Después de los días de viento le dije a Erik que saliéramos siquiera a dar una vuelta. Fuimos cerca, pero apenas sube uno unos metros otra vez hielo, nieve y lagos congelados. Aquí, según he concluido es la "tierra caliente" de la región :-(
     Saludos. Me he diagnosticado una bronquitis. Y sigo cuidándome, claro.



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